Esta es la tarta de Ángel, un niño de cinco años que le encanta Pablo Alborán. Según contaba su madre,se sabía todas las canciones de él.
Por eso no podía ser menos que el día de su cumpleaños estuviera presente este artista, no físicamente pero si en azúcar.
Se me ocurrió que porqué no poner la palabra felicidades en una partitura y la verdad que la idea quedó genial.
Muy fácil de hacer. Tan sólo tienes que estar fondant blanco y cortar un rectángulo más o menos de una medida que no sobresalga mucho y tampoco que nos quedemos cortos. Dejas secar un poco y con ayuda de una regla y un rotulador negro apto para repostería, trazamos cinco líneas. Las notas musicales las pinté a mano ya una vez colocada la partitura. Para que mantenga con esa forma,os podéis ayudar se servilletas,algodones o algo por el estilo para posteriormente poder quitar.
La guitarra está modelada a mano sin molde.
Esta tarta la presente a un concurso organizado por " la tarta perfecta".
Las cinco tartas más votadas conseguían una máster clas en Murcia por Pedro Olmedo. Y así fue,en Enero viaje hasta Murcia. Fue toda una experiencia y fin de semana para no olvidar,ya que conocía a grandes artistas como Daniel Casero y Robledo, pero eso os lo contaré en otro post.
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